Chávez les quitó la máscara

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Mario Forti
5 de Noviembre 2006.

“Simón Bolívar es el autor intelectual del 4 de febrero de 1992, de la rebelión bolivariana de
los jóvenes soldados venezolanos”. HUGO RAFAEL CHAVEZ FRIAS


Intervención en la entrega del Premio Internacional
de la Unesco “José Martí”
La Habana, 3 de febrero de 2006.


¿Por qué será que, la secretaria de Estado, Condoleeza Rice; el Jefe del Comando Sur del Ejército, Bantz J. Craddock; el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, y el propio Bush, hicieron declaraciones contrarias al Gobierno venezolano satanizando a Hugo Rafael Chávez Frías candidato y presidente?

Porque están a punto de ir a las elecciones legislativas el próximo 7 de Noviembre en donde se renovarán las dos Cámaras del Congreso. Los republicanos atacan a Chávez y a la vez indirectamente a Lula, Kirchner, Morales y los demás presidentes de repúblicas socialistas latinoamericanas, con la finalidad de buscar demonizar al líder venezolano como un tirano, desprestigiando su gestión gubernamental, y fomentando la deslegitimización del proceso electoral que tendrá lugar el próximo 3 de Diciembre.

La administración de Bush y sus halcones no ha podido ganarle una sola batalla a la revolución chavista internacionalmente, acaba de confrontar durante 47 actos electorales en la ONU utilizando a Guatemala como lacayo sudamericano, y debe sentir el peso del rechazo de la última Cumbre Hispanoamericana contra el muro que levantan los gringos fascistas contra México. Recientemente en Bolivia se inició un proceso de unidad latinoamericana en la creación del Bloque Regional de Poder justamente para enfrentar la guerra asimétrica que tenemos contra los imperialistas donde quiera que se encuentren. La descalificación constante de la democracia venezolana y de sus instituciones sirve a los republicanos como una estrategia propagandística, porque su base electoral es muy conservadora. ¿Qué reacción tendrá en el mundo la muerte por horca de Saldan Hussein? La sentencia es justo 48 horas antes de que los gringos vayan a las elecciones legislativas.


Actualmente tienen que renovar el puesto de 435 diputados y 100 senadores. Y nuestra revolución es usada como chivo expiatorio para cubrir la serie de fracasos internacionales como en el caso de la conducción de la guerra en Irak, en Palestina y en todo medio oriente; pero también internamente como fue la lenta reacción ante los desastres que ocasionó Katrina y reveló el racismo del gobierno fundamentalista de derecha gringo, los déficit presupuestarios, el muro contra los mexicanos, las leyes contra los extranjeros e indocumentados, etcétera. Utilizan la estrategia de repetir rumores indefinidamente (léase las matrices de opinión de los 4 canales privados en nuestro país) para que se convierta en parte de la realidad, hasta confundir tanto al espectador que le cambian su mentalidad (lavan su cerebro políticamente). Los republicanos controlan hasta el próximo Martes 231 diputaciones y 51 puestos en el Senado. Desesperados pretenden desestabilizar a Venezuela porque Chávez les ha quitado la máscara que tenían.

Las elecciones de hoy en Nicaragua, las legislativas en el propio EEUU el Martes que viene, la segunda vuelta en Ecuador el 26 de este mismo mes y a la semana siguiente las elecciones presidenciales en Venezuela conforman un cuadro de guerra a muerte contra todo lo que signifique poder popular. Por eso es que notamos más rabia, odio, vulgaridad, perversión, furia, desconsuelo, resentimiento y toda clase de manifestación de cólera en las filas de la oposición, porque están inflamadas desde los órganos de influencia mediática gringos.

Rosales representa el regreso al puntofijismo disfrazado de “cambio” y manteniendo de manera recalcitrante viejos paradigmas que sólo dejaron un saldo en rojo de sangre en nuestro suelo venezolano: muerte, miseria, exclusión, impunidad, ignorancia, sometimiento y todos los vicios del burocratismo autocrático de los conocidos partidos políticos lacayos de los yankis. Su lema electoral de “votar y cobrar” demuestra descarnadamente su visión déspota y sanguinaria de sus compatriotas empobrecidos por políticos como él que gobernaron casi 180 años la república de Bolívar, desde Páez hasta Caldera.

Se aferran a un debate público cuando tienen el peso de la realidad de votos en contra que habla más duro que cualquier discurso en cualquier púlpito de la nación. Ese ronco clamor de venezolanos concientes revolucionariamente de no dejarse aplastar por la maquinaria satánica de los imperialistas gringos y europeos no los deja dormir en paz. La hipocresía es clara, por un lado gritan ¡debate! Y por el otro traman un golpe. Juegan a las elecciones pero con las armas del Pentágono bajo la mesa. El lacayismo criollo merece toda una revisión histórica para poder comprender el resentimiento burgués que desde Páez para acá va perdiendo terreno y desde hace 14 años está herido de muerte en Venezuela. Los fanáticos de la oposición se vuelven fundamentalistas de derecha y nada de lo que logramos en nuestro país les parece relevante porque están envenenados por dentro y por fuera. Los casi 35 mil millones de $ en reserva del Estado lo ven como botín no como recurso para el pueblo. Todos los avances en 8 años lo traducen en cansancio y fastidio. Pero no se dan cuenta de que para la mayoría esos logros representan la redistribución de nuestra riqueza natural. Para nosotros se traduce en un 44 % del presupuesto nacional en inversión social.

Los escuálidos que están ocultos en puestos de mandos privados y públicos son guerrilleros burocráticos que estancan, desvían, retrasan y alteran todo lo que ve en las oficinas bajo su poder y mando, pero que saben que no durará mucho tiempo más. El voto-cobro habla claramente del mercenario político, nada más alejado que un venezolano que ha tomado conciencia revolucionaria de que su expresión electoral es para garantizar a su país la soberanía y la dignidad que se merece.

Los mitos que usa la oposición para confundir a los indecisos se cocinan en Miami, como lo son que Venezuela va hacia un gobierno comunista, que depende de los cubanos, que es sumisa a Fidel, que es esclava de los intereses de este país caribeño; que regala su petróleo, y lo utiliza como medio de manipulación internacional, que ha cubanizado la salud, que ha ideologizado la educación volviéndola castrista y comunista, igualmente con las fuerzas armadas. Detrás de esta satanización del proceso revolucionario existe la intención siniestra de confundir con las alteraciones y mentiras repetidas una y otra vez hasta crear en el oyente y el televidente, una opinión que no nace de su relación con el medio en que vive. No solo son expresados en los medios masivos de comunicación social privados, sino defendidos por lacayos como Uribe, García, Calderón y Rosales.

Mientras tanto Venezuela revolucionaria fija su posición antiimperialista en el foro mundial de las naciones a través de su soberana relación con países que apoyan la causa Palestina, la del pueblo de Irak frente a la invasión genocida yanki, con el pueblo revolucionario de Irán, China, Corea del Norte, Rusia, Bielorrusia, Hungría, países del Africa, y Sudamérica que desde Oaxaca hasta la Patagonia grita con furor ¡Viva el poder del pueblo! Y aquí en nuestro suelo patrio gritamos cada vez con más fuerza ¡Con Chávez gobierna el pueblo! Nuestro voto revolucionario no tiene precio, no lo compra nadie porque es el voto de conciencia revolucionaria nacido de la lucha de nuestros ancestros y presente en cada día de nuestras vidas en que sumamos más fuerza y más valor a las reivindicaciones que traen más justicia, soberanía e independencia nacionales. Para nosotros Rosales perdió antes de entrar en las elecciones, incluso antes de firmar como delegado de los gobernadores el Acta de Carmona, para nosotros Rosales perdió desde el 4 de Febrero de 1992.